Blog Finalista Premios Aragón en la Red 2014

lunes, 25 de agosto de 2008

muralla romana





















La muralla romana de Zaragoza
llegó a tener una longitud de unos 3.000 metros y 120 torreones.
Fue construida entre el siglo I y el siglo III.
Se han conservado dos tramos:
el más largo, de unos 80 metros de longitud,
en el extremo noroeste
de lo que era la ciudad romana de Caesaraugusta,
al lado del Torreón de la Zuda,
y otro en el lado nordeste,
que actualmente forma parte
del Convento del Santo Sepulcro.

fachada bombardeada


En la fachada este del Pilar
se pueden observar aún
las marcas dejadas por los bombardeos
durante las terribles batallas
del segundo sitio de Zaragoza.

Cuatro de Agosto

La fecha de 1808
que recuerda esta calle del "Tubo" zaragozano
rinde homenaje a los paisanos que
"realizaron las acciones más brillantes
y darán lustre y más honor a Zaragoza..."
según escribió Faustino Casamayor.
Pocos, pero interminables días después
concluyó el primer sitio, el 14 de Agosto.

domingo, 17 de agosto de 2008

fondos documentales














En la Capilla de San Martín,
en el Palacio de La Aljafería,
se puede ver una exposición
de fondos documentales.
Entre ellos figura éste
en el que aparece Antonio Pérez.
El enfrentamiento que éste provocó
y que se enmarca en los hechos conocidos
culminó en 1592
con la casi total pérdida

restauración






En estos arcos podemos apreciar
que la restauración llevada a cabo en La Aljafería
permite diferenciar con claridad
los restos conservados de todo lo añadido,
pero dándole al conjunto
una integridad
que hace posible una muy aproximada intepretación
de lo que aquí se construyó.

lado norte



En esta zona se edificaron
las dependencias más importantes
en la época de los hudíes:
el Salón Dorado y la Mezquita.
Suelos de mármol.
Zócalos y capiteles de alabastro.
Decoraciones con relieves caligráficos...
Todo ello dotaba de grandeza
al palacio.

escalera noble





Esta escalera monumental
de dos amplios tramos
conduce a las dependencias reales
de la planta superior.

ventanales

Desde los ventanales que iluminan
la escalera de acceso a la planta noble
se divisa el Patio de Santa Isabel.



Patio de Armas


En el rellano de la escalera
encontramos estas tres ventanas
rematadas con arcos decorados,
y desde las que puede contemplarse
el Patio de Armas
(Patio de las Cortes en la actualidad).

aljibe















Desde la escalera noble
se puede ver en el lado sur
del Patio de Santa Isabel
el aljibe que recogía las aguas vertidas.
En el otro extremo del patio había otro similar.

hojas y tallos


Hojas y tallos
constituyen la decoración
de los arcos que culminan los ventanales
de la escalera noble.

bovedillas















Bovedillas que componen
la techumbre de la escalera noble
decoradas con pintura al temple.

escudo oficial




En la portada principal de acceso
al Salón del Trono
destaca el arco trilobulado
con tímpano de cinco lóbulos
en cuyo centro se encuentra,
sostenido por dos leones,
el escudo oficial de la monarquía española
incluyendo el blasón del reino de Granada
recién anexionado.

arcada restaurada





La arcada que se contempla
mirando hacia el pórtico sur
está restaurada
mediante el vaciado de los arcos originales
que están depositados
Suponen el mayor atrevimiento
y distancia por su innovación
con respecto a los modelos califales
de las arquerías del lado norte.

yesería

En una de las antesalas del Salón del Trono
se conserva un pequeño trozo
de yesería decorativa
que mediante la restauración del contorno
queda realzada.




escudo




Motivos heráldicos de los Reyes Católicos
componen las techumbres de estas salas.

tanto monta



Los magníficos taujeles de las antesalas de espera,
realizados por carpinteros mudéjares aragoneses,
presentan retículas geométricas
de madera posteriormente tallada,
pintada y sobredorada con pan de oro.

techumbre




Florones de hojarasca
rematados con piñas pinjantes
decoran la techumbre de esta sala.

pasos perdidos





Tres pequeñas habitaciones de planta cuadrada
comunicadas entre sí por grandes ventanales
que dan al patio de San Martín,
servían de antesalas de espera
para quienes iban a ser
recibidos en audiencia por los reyes.
De ahí el nombre de salas de los pasos perdidos.

pasos perdidos 1























Esta es una de las puertas
de acceso a las salas de espera,
donde el nerviosismo y la ansiedad
se distraían con rápidos pasos
a ninguna parte.

pasos perdidos 2

Las puertas de acceso a las salas
están rematadas por estilizados arcos
diferentes entre sí.




pasos perdidos 3

Uno de los elementos más estimables de estas salas
son sus solerías,
que en origen eran azulejos cuadrados
y alfardones hexagonales de cerámica vidriada en colores,
formando caprichosas cenefas.
Fueron elaborados en los históricos alfares de Muel (Zaragoza)
a fines del siglo XV.




octógonos




En el artesonado del Salón del Trono,
se observan estos octógonos
con un florón central de hojarasca rizada
que rematan en grandes piñas colgantes
que simbolizan la fertilidad y la inmortalidad.



Este techo se reflejaba en el suelo,
que reproduce los treinta cuadrados
con sus respectivos octógonos inscritos.

caligrafía










La caligrafía gótica que rodea el Salón del Trono
dice así:
Ferdinandus,
Hispaniarum, Siciliae, Corsicae, Balearumque rex,
principum optimus,prudens, strenuus,
pius, constans, iustus, felix,
et Helisabeth regina,
religione et animi magnitudine supra mulierem,
insigni coniuges,
auxiliante Christo, victoriosissimi,
post liberatam a mauris Bethycam,
pulso veteri feroque hoste,
hoc opus construendum curarunt,
anno salutis MCCCCLXXXXII.
Lo que se traduce como:
Fernando,
rey de las Españas, Sicilia, Córcega y Baleares,
el mejor de los príncipes, prudente, valeroso,
piadoso, constante, justo, feliz,
e Isabel, reina,
superior a toda mujer por su piedad
y grandeza de espíritu,
insignes esposos
victoriosísimos con la ayuda de Cristo,
tras liberar Andalucía de moros,
expulsado el antiguo y fiero enemigo,
ordenaron construir esta obra
el año de la Salvación de 1492.

Salón del Trono



Bajo el artesonado del grandioso Salón del Trono
discurre una airosa galería de arcos conopiales
transitable y con antepechos calados
desde la que los invitados
podían contemplar las ceremonias regias.

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